Si, hoy, por pura casualidad me he enterado la noticia.


Sé, que no debería alegrarme, pero no he podido evitar que se me escapara una sonrisa al leer-la.


Ciertamente, no he visto ni una gala de ésta temporada y no se puede criticar lo que no se ve, no obstante y sin entrar en detalles de si los personajes lo hacen bien o mal, si puedo decir, y siempre a título personal, que estoy harto de ese tipo de programas y en especial de OT.


Motivos?, bueno, empezaría por decir, que ser cantante, no es sólo formación. Como todo buen don, un cantante se nace, no se hace y eso es lo que pretende conseguir OT, producir en cadena a un tipo de cantantes que se dediquen a engordar sus sacas a costa de fans histéricas sin ningún criterio musical, con tan sólo unas simples clases.


Yo no se cantar. Tampoco sé dibujar, ni jugar al futbol, ni bailar, cómo una larga lista de cosas, y a pesar, de que estudiando y practicando, puedo mejorar en algunos ámbitos que Dios baje y lo vea, si con unas simples clases me puedo volver todo un profesional.


Bien es cierto que se me podría decir que todos los que entran en OT tienen ese don. Realmente el que hace la selección busca eso? o más bien busca a un determinado arquetipo de cantante?.


Hay muchas pequeñas cosas que han hecho que odie a Operación Triunfo. Partiendo de los claros favoritismos, a las parafernalias montadas para ganar audiencia.


Se podría decir que muchos han logrado el éxito, Bisbal, Chenoa, David Bustamante… y aquí es dónde ya entra mi gran segundo motivo por odiar ese tipo de programas.


Odio la Sgae, XDD y a muchos de los vividores suscritos a ella.


Porqué recordemos, dónde tiene David Bisbal su casa?, en Miami. Dónde paga sus impuestos?,…. Mmm ni idea XDD en Miami?, eso no lo sé, pero a veces, me llevo la sensación, y no sólo con David Bisbal, que sólo se acuerdan de su querida España, cada dos o tres años, que es cuando vuelven a hacer un disco, para volver a por más dinero ya que se les ha acabado el chollo.


Odio a los cantantes que nos cobran por nuestras fotos, por nuestros discos duros e incluso por los politonos del móvil, porqué si, la Sgae cobra de cualquier dispositivo capaz de almacenar, sea o no con el fin de almacenar música, alegando que tienen grandes pérdidas debido a la piratería y a cambio sólo recibamos un disco cada 2-3 años o un anuncio de nocilla.


En fin, siento mucho que la música española, se quede sin un gran cantante por culpa de la precipitada cancelación del programa, por cierto, cancelación debida a la baja audiencia y a las pocas ganancias que estaba generando.


Seguro que nos supondrá una gran pérdida, pero seguro que se han perdido muchos tantos grupos por el camino, que luchan día a día, tocando en metros, trenes, calles e iglesias, cómo ha pasado toda la vida, por no ser el perfil de lo que la industria busca, por eso, no puedo evitar que se me escape una sonrisilla.

Rindámonos a la evidencia, de que a veces, lo que uno siente, no es correspondido.A veces, es una simple ilusión diseñada por nuestro cerebro para satisfacer nuestros deseos, que pocas veces corresponde a la realidad.

Día Post-Valentín, de bombones en los escaparates, de anuncios del Corte-Inglés y de chicos con flores en la mano y una sonrisa idiota en su cara y me pregunto, que ha cambiado? son ahora más felices?, sigue siendo el día de hoy tan especial como el de ayer?

Supongo, que hay algo que se me escapa, que para mí el amor es cómo la canción, “atrapar granadas por él” y eso para un solo día es complicado.

Sinceramente, la vida está llena de cuernos, de engaños, mentiras y un largo etc., que hace que el amor de hoy en día, no dure más de un par de meses, o al menos, esa siempre ha sido mi sensación y eso me entristece enormemente en dos sentidos, porqué si acierto, estamos condenados a jamás lograr la pureza de lo que realmente significa el amor y si me equivoco, significa que soy incapaz de sentir-lo.

Siempre he esperado más de la gente, de lo que quizá yo mismo puedo dar. Me hubiera gustado vivir ese cuento que nos contaban cuando éramos críos, dónde todo acababa bien, el príncipe lograba el amor de su princesa, con un largo beso y comían perdices. Pero ahora me encuentro que todo me cuesta el doble.

He renunciado a muchas cosas. He aprendido, que dada mi situación, no podría tener lo que quizá para el resto era tan sólo tenían que abrir la mano. He entendido, que a veces, amar una persona, no implica que ésta te corresponda.

A pesar de entender toda y cada una de esas cosas, no logro acostumbrarme a ello. No logro acordarme que sería más fácil asumirlo, porque de esa manera me ahorraría muchos quebraderos de cabeza.

Que terco es el hombre.

Que terco soy yo. Porqué a pesar, de saber, que el amor es una mierda, que se sufre, se pasa mal, que se te miente y que no se te corresponde, sigo buscando ese final feliz de cuento…

Frase que dice Beyoncé a Lady Gaga en el videoclip "Telephone", que personalmente me parece muy acertada.
Viene a significar que cuando se pierde la confianza en alguien, aunque se intente reparar, jamás se puede olvidar del todo, siempre quedan rescoldos, sobre todo en alguien como yo, que soy por desgracia muy rencoroso.
Supongo, que debería saber perdonar, olvidar, y ese largo etc. Pero, y si, existe un pero, no es innato en mí,  no he nacido con ese gen.
Imagino, que cómo la gran mayoría de gente, me he llevado desilusiones, con la gente, con el trabajo, etc, y la experiencia me ha dicho, que cuando me he dignado a dar nuevamente otra oportunidad "Zas!, en toda la boca!" XDD, lo que me ha hecho ser precavido en cuanto al nivel de confianza que puedo ofrecer.
Es triste ser así.
Me gustaría, vivir en Yupi, dónde jamás te hagan daño, dónde la gente no es mala y no te apuñalan por la espalda, pero chicos, vivimos en un mundo, dónde no te puedes permitir ser tan ingenuo.
Supongo que cuando te das cuenta de ello, es cuando creces, cuando pierdes esa inocencia de niño, en que crees que la gente es buena, que puede cambiar y te conviertes en uno más, dónde pierdes la esencia y te perviertes.
A veces, pienso en cómo era, y se me escapa una sonrisa. Recuerdo, cuanto me indignaba por las injusticias que  ocurrían a mí alrededor y creía que podía cambiar el mundo. Ahora me doy cuenta que sólo quiero sobrevivir.

Suerte, que muchas veces traiciono a la persona que soy ahora, para volver a ser el niño que era entonces y doy nuevas oportunidades. Supongo, que he aprendido, que nadie es perfecto y que hay gente, aunque sea poca, en que realmente se merece en que se las des.